Las Horas Más Oscuras | Opinión

Buen día, queridos lectores, estamos de regreso con otra reseña/opinión sobre una película con temática de la Segunda Guerra Mundial. Algo que, los más viejos en leer este espacio, recordarán que comenzó cuando creé el Challenge.

Bueno, hoy vamos a hablar de una de esas películas que refleja los momentos cumbres de una de las personalidades de la contienda más sanguinaria de la historia. Y es que, así como Hitler, cierto personaje también se volvió en figura reconocida de la guerra, y esa persona fue Winston Churchill, Primer Ministro del Reino Unido durante la SGM.

Así que, sin más preámbulo, comencemos.

«Aquel que no conoce su historia, está condenado a repetirla»

Napoleón Bonaparte.

Contexto Histórico

Ya hemos hablado de cómo la guerra se fue dando poco a poco, con los alemanes dando señales e indicios de que harían algo que cambiaría la historia del mundo, y con los ingleses y franceses creyendo que todo era una mentira. Sin embargo, un tema que se ha tocado poco, es el tema de la política de entonces, es el hecho de cómo estas cuestiones referentes a los hombres poderosos, fueron la piedra angular de un evento tan destructivo como lo fue la SGM.

Y para eso hay que pasar por tres figuras históricas: Neville Chamberlain, Adolf Hitler y Winston Churchill.

Pesadillas de Tiempos Pasados

I

Me gustaría hacer referencia a esa frase mencionada por Napoleón Bonaparte, en donde hace énfasis en el análisis del pasado para definir los actos futuros. Y en la guerra eso es un pilar fundamental para el desarrollo de los eventos, y los franceses e ingleses lo saben muy bien. Después de la Primera Guerra Mundial, toda Europa había quedado tan devastada y agotada que, costara lo que costara, estaban determinados, los vencedores, a no repetir aquella actividad sangrienta. Incluso los estadounidenses querían desentenderse de un Viejo Mundo que consideraron corrupto y depravado.

Y es aquí donde entra Neville Chamberlain. Era el Primer Ministro Británico entre mayo de 1937 y mayo de 1940. Recuerden lo que se ha venido diciendo desde hace unos meses en estos artículos. Para cuando estalla la guerra, ningún país vencedor de la PGM quería que todo desbocara en la SGM, por lo cual, las tentativas de Hitler y su presión por recuperar lo que «era» de los alemanes, eran respondidas con tratos de paz y negociaciones absurdas. Sin embargo, las mismas declaraciones de Hitler indicaban una sola cosa: Quería la guerra. Incluso dijo que la quería en ese momento cuando tenía la energía y no después, cuando ya cumpliera cincuenta.

Es así como, un 31 de agosto, momentos antes del primer golpe, los allegados de Chamberlain intentan entablar una conexión con Hitler, pero este y sus allegados dimiten y avanzan e invaden Polonia. La pesadilla de muchos se vuelve realidad cuando, a un año de comenzada la guerra, en la cual solo los ingleses y franceses hacían algo para evitar que avanzara a más; Hitler decide que quiere invadir Inglaterra.

II

La paz ya no es una opción, los tratados ya no sirven para nada contra un hombre que lo quiere todo y lo quiere por la fuerza, y es aquí donde aparece Winston Churchill. De acuerdo. Hitler quería la guerra, Chamberlain proponía cumplir algunas cosas de las que pedía Hitler para que todo quedara en santa paz, pero, ¿Qué quería Winston Churchill? ¿Quién fue Winston Churchill? Vaya interrogante.

Fue un político y orador británico, al menos eso podemos leer en la red. También podemos encontrar que estuvo al frente en la PGM, por lo que, como muchos otros, era un sobreviviente de dicha guerra, un tanto reciente, lo que le confería este poder de palabra al saber lo que estaban pasando. Conocía la pesadilla, la había vivido y la miraba en televisión y la escuchaba en radio cuando se trataba de Hitler. Fue de los primeros en alertar el peligro que este hombre representaba y de los primeros en ser ignorado.

Fue así como, en 1939, siendo de los más cercanos a Chamberlain, aunque, mejor dicho, fue su opositor; le declaró en reiteradas ocasiones que, la única manera de parar a Hitler, era plantarle cara. Chamberlain, por su aparte, continuaba reviviendo los horrores de la PGM y las trece millones de vidas que se perdieron. Pero Churchill sabía que si no se hacía algo, la cuenta iba a ser peor, y aunque lo fue, hizo algo para parar al villano número uno de la SGM.

III

Mayo de 1940. Con los alemanes pisándoles los talones, franceses e ingleses se retiran a Dunkerque, y mientras intentan resistir el mayor genocidio en la historia militar, Chamberlain y Churchill deciden el destino de la guerra en Londres. Hitler da a entender que el próximo objetivo es Gran Bretaña, luego de casi toda Europa bajo sus pies, y es aquí donde Churchill hace su maravillosa jugada.

Siempre fue un hombre feroz, muchos le tenían miedo, era irascible, pero culto, bastante culto e inspirador. Orador nato. Valiéndose de eso, y para ganar unas elecciones reñidas, decide mezclarse con el pueblo y preguntarles si desean que Hitler invada Inglaterra, si desean seguir con la paz o contraatacar. Luego de una tarde de respuestas, va a la Cámara de Los Comunes, mientras en Dunkerque, miles de hombres esperan una muerte inminente; y les dice a todos que, de seguir en tratados de paz, Hitler llegará a Inglaterra y los agarrará con los pantalones abajo. De acuerdo, no dijo eso, pero podría traducirse de esa manera.

Para entonces, Chamberlain, impotente ante una situación de esa magnitud, se vio en la necesidad de dimitir y dejar su puesto a otro más competente. Por su parte, Churchill, les mostró a todos el miedo de los pobladores. Les dijo cómo se sentían ellos y cuál debía ser su papel en esto. La paz ya no era una opción, Hitler estaba a las puertas tocando, y no era una visita, era una invasión. Fue así como fue elegido Primer Ministro de Inglaterra, y luego de una jugada magistral a bajo perfil, preparó una evacuación.

IV

¿Recuerdan a los miles de hombres esperando la muerte inminente en Dunkerque? Bueno, el rescate fue preparado por Winston Churchill, diciendo a todo aquel que poseyera un navío, que cruzara El Canal de La Mancha para rescatar a todo militar posible. Y gracias a que todo eso salió bien, fue bien recibido por el pueblo, cosa que le hizo dar su famoso discurso «Pelearemos en las playas», donde inspiraba a todos a detener la mayor amenaza de todas.

A pesar de que grandes extensiones de Europa y muchos estados antiguos y famosos han caído o pueden caer en las garras de la Gestapo y todo el aparato odioso del gobierno Nazi, no vamos a languidecer o fallar.

Llegaremos hasta el final, lucharemos en Francia, lucharemos en los mares y océanos, lucharemos con creciente confianza y creciente fuerza en el aire, defenderemos nuestra isla, cualquiera que sea el costo, lucharemos en las playas, lucharemos en las pistas de aterrizaje, lucharemos en los campos y en las calles, lucharemos en las colinas, ¡nunca nos rendiremos!

E incluso si, cosa que ni por un momento creo que suceda, esta isla o una gran parte de ella fuera subyugada y estuviera hambrienta, entonces nuestro Imperio más allá de los mares, armado y protegido por la flota británica, cargaría con el peso de la resistencia, hasta que, cuando sea la voluntad de Dios, el Nuevo Mundo, con todo su poder y su fuerza, avance al rescate y a la liberación del Viejo.

Por ahí una referencia a que Churchill pidió ayuda a Norteamérica para ser salvados.

Las Horas Más Oscuras

Precisión Histórica

Algo que he aprendido en todos estos meses sobre las películas de La Segunda Guerra Mundial, que ya son un género en sí, es la Precisión Histórica. Es ese hecho sobre ser fiel a los hechos. Y es que, hablar sobre un evento así, con tantos pormenores, es normal que haya algunos datos o momentos que fueran cambiados con tal de contar la mayoría posible de los hechos que pasaron. Sin embargo, lejos de las batallas, lejos de las balas, lejos de la crudeza de la guerra, en esta película nos vemos inmersos en la vida de un hombre tranquilo en una Inglaterra tranquila lejos del caos.

Y eso fue mostrado acertadamente en la pantalla. Siempre me gusta comenzar estas reseñas u opiniones con el contexto histórico, para que entendamos de qué va lo que estamos viendo, dónde estamos, además de que, era el motivo del Documental Fílmico. Y en este caso, luego de leer lo que pasó en verdad y ver lo que nos narró la película, debo decir que fueron precisos, sumamente precisos.

Se limitaron a los hechos y dejaron que las cosas se dieran tal cual pasaron. Contaron la historia y dejaron que ella hablara lo sucedido y fue genial, fue magnífico, porque nos dieron a entender qué había detrás de toda aquella parafernalia infernal que constituía la guerra. Nos dejaron ver a los artífices y conocerlos, convivir con ellos y entender los matices que los componían, nos dejaron estar detrás del frente, siendo los dirigentes del evento más mortífero de la historia. Y con eso, la película gana por mucho en este reto. Sin duda, aquí se lleva todos los puntos.

Actuación y Dramatización

Bien, lo voy a escribir, lo voy a escribir, lo voy a escribir: ¡Gary Oldman es un actorazo! El tipo cada vez que va a hacer una película, se mete tanto al papel, que termina haciendo cada actuación mejor que la anterior. Es un tipo multifacético, y con el tiempo se va ganando cada vez más ese consagrado título de ser uno de los mejores actores de todos los tiempos. Y es que, esta película no es la excepción.

El tipo deja mostrar en todo su esplendor la razón de por qué es llamado un actor del método y cómo asume su papel como transmisor de emociones y sentimientos. Nos deja ver, a los que vivimos en este tiempo, a una especie de Winston Churchill que, si bien no es la persona que vivió durante la SGM, es una buena representación de este. Sin duda, un ejemplo a seguir para aquellos que quieren ser parte de ese mundillo de la actuación, para aquellos que quieren incursionar en el séptimo arte, incluso para aquellos que hacen lo propio. La dedicación es la clave del éxito, y Oldman lo demuestra película con película.

Puedo decir que aquí, la cinta se lleva todos los puntos también.

Título

Las Horas Más Oscuras. Debo decir que, cuando escuché el título, me imaginé algo que tenía que ver con la guerra, solo que no presté atención de qué se trataba. Me refiero a cuando «escuché» los anuncios por la TV (Casi no veo anuncios de películas). Me imaginé lo peor, sobre todo en su esencia, más luego de asociarlo con esa misión en Assassins Creed Syndicate, la cual llevaba por nombre La Hora Más Oscura, donde tenías que luchar en Londres durante la PGM.

Así que, pensé que se trataba de algo similar, solo que más reciente. Pero no fue así, y aunque el contexto era una guerra, jamás creí que todo se desarrollaría con palabras. Sí, el título hace referencia a un hecho que estaba por venir, mejor dicho, a lo que había que hacer ante un hecho que estaba ocurriendo. Para ese momento, alguien debía plantarle cara a Hitler y decirle que no iba a hacer lo que quisiera, costara lo que costara, y que bueno que Churchill lo hizo, de ahí ese nombre. Fueron las horas más oscuras.

En la cinta, no solo por el título, se refleja la necesidad que tenían de responder a la ofensiva de los alemanes, se notaba el miedo que representaba hacerlo, sin embargo, las consecuencias de no hacer nada, habrían salido peor que las de haber hecho algo, aunque murieran millones.

Conclusión

Y en consonancia con lo anterior referente al título, creo que es una cinta que no solo es referente al tiempo en el que está basada, sino a todos los tiempos posibles. Es atemporal, con un mensaje importante para aquellos que tienen la oportunidad, o como decía Lincoln, la obligación moral de hacer algo.

Vivir con el miedo y evitar por todos los medios un conflicto similar al de la Primera Guerra Mundial sin duda que era una buena idea a esas alturas de la vida, pero vivir con el miedo de hacer algo y que esto desbocara en un conflicto y no hacerlo solo por eso, y aun así, dejar que un sanguinario hiciera lo que quisiera, sin duda era una estupidez. Y hay un dicho que dice que el ser humano es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra.

Con esto no quiero decir que apruebo los actos que llevaron a culminar todo en otra Guerra Mundial, solo digo que, de no haber hecho nada, creo que las consecuencias habrían sido peores (Habría que hacer un post mostrando los posibles futuros resultantes de que los nazis ganaran la guerra). Y tampoco es algo nuevo, es los últimos ocho mil años de historia de la humanidad, solo quinientos de esos años los hemos pasado en paz. La guerra es algo innato del ser humano, pero también lo es el amor, la paz, la empatía, y vaya que la guerra nos muestra todo esto.

Es aquí donde esa frase de Napoleón Bonaparte cobra más fuerza y nos invita, no solo a prever los tiempos futuros, sino a no ser el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra.

Y Las Horas Más Oscuras son la prueba fidedigna de que, Aquel que no conoce su historia, está condenado a repetirla.

Bueno, eso ha sido todo por esta vez. Espero que les haya gustado y que lo hayan entendido. También espero que hayan visto la película y la hayan disfrutado como lo hice yo.

De cualquier forma, los invito a comentar abajo qué les pareció y a compartir este post con sus amigos y familiares. De nuevo, les recuerdo que estoy subiendo una historia semanalmente, ya tenemos dos capítulos, y unos amigos míos de varias partes de Latinoamérica me están ayudando con las ilustraciones.

Dejaré abajo los enlaces de los capítulos subidos hasta el momento:

Crónicas Siderianas / Prólogo

Crónicas Siderianas / Capítulo Uno

Mientras tanto, me despido de ustedes en las palabras del vago de la esquina: “Lo importante no es el poder, lo importante es albergar la esperanza de reconstruir y recuperar el mundo que perdimos.”